
8 declaraciones incendiarias de Rupert Everett que dieron la vuelta al mundo
Se convirtió en el estereotipo andante de hombre gay hacia la década de los 90 en la película La boda de mi mejor amigo. Sin embargo, a pesar de que se convirtió literalmente en la fórmula mágica qué salvaría del irremediable fracaso a la icónica película de Julia Roberts después del enorme rechazo que la película despertó durante las sesiones de su pre-lanzamiento, el actor fue condenado al ostracismo después de su estrepitoso fracaso junto a Madonna en Algo casi perfecto. Desde entonces, Everett ha sido centro de polémicas por hacer declaraciones que no han dejado indiferente a nadie. Por lo visto, el actor optó por seguir la filosofía de Oscar Wilde, es mejor que hablen mal de ti a que no hablen de ti.
El actor nos ha dejado titulares que nos han dejado con la boca abierta en más de una ocasión. A continuación recopilamos algunos de ellos.

Sus mordaces declaraciones sobre el ejército británico
Los soldados de hoy son tan débiles… No entiendo para qué vas a una guerra si no vas a saber cómo comportarte. Te pagan porque debes cumplir tus funciones. Te pagan porque eres un cabrón que quiere atar a los prisioneros que quiere conectar sus pezones y sus testículos a unos electrodos y mear sobre ellos. Y luego nos llevamos las manos a la cabeza como si acaso fuesen los americanos los únicos que lo hacen.
La entrevista en la que comentó las habladurías de su supuesta cirugía estética
Me hicieron una foto en la que parecía que me había hecho un lifting. Dio la vuelta al mundo y me hizo perder montones de trabajos.
El momento en el que habló de los hombres gays después de los 50 años
Yo podría prenderme fuego en un bar gay y la gente solo se inmutaría para encenderse los cigarros con mis llamas. No quiero acabar sacado en brazos de una discoteca a los 70 años vestido con una camiseta estampada y una gorra.
Su ácida impresión sobre el concepto de globalización
Uno ya no puede perderse en París porque te encontrarás al mismo marica con el que tomaste cócteles la semana pasada en Vauxhall. Todo el mundo se está moviendo. Gracias a Dios pronto nos quedaremos sin petróleo.

Sobre la caída del imperio norteamericano
Ahora los americanos son unos quejicas victimistas cuyo idioma está completamente sacado de dos series, Friends y Sexo en Nueva York, y no resultan nada sexys.
Su opinión sobre la gestación subrogada
No se me ocurre un plan peor que ser criado por dos homosexuales.
Su deprimente visión sobre el matrimonio homosexual
Odio las bodas heterosexuales. Son grotescas. La tarta, el velo, la fiesta y el inevitable divorcio dos años después. Me parece una pérdida de tiempo en el mundo heterosexual, y en el mundo homosexual encuentro trágico que queramos imitar una institución claramente desastrosa.
El día que se definió a sí mismo
Soy un hombre gay que viene de los últimos años de ilegalidad. Eso me dio carácter. Me situó fuera de la estructura normativa así que eso de querer ser heteronormativo, que es lo que se lleva ahora, no es para mí.