Billy Eichner: ‘No intento representar una versión de la vida gay que sea «aceptable» para los espectadores heterosexuales’

Billy Eichner ha ganado una gran popularidad durante los últimos años. ‘Bros’ se ha convertido en el punto culmen de su carrera por ser la primera comedia gay producida por un gran estudio. Recientemente el actor y comediante reveló una dimensión de su vida bastante inquietante. 

Aunque reconoce que tuvo el privilegio de crecer en Nueva York y con unos padres muy “liberales y tolerantes que supieron quién era muy pronto”, en su vida también hubo sitio para la homofobia. No obstante, según revela, en su caso se manifestó de una forma más tardía: Fue víctima de homofobia por primera vez a los veinte años, cuando intentaba iniciar su carrera. El ataque vino propiciado por su propia manager. 

«En 2006, tenía una representante que representaba a muchos talentos de Broadway. Es bastante conocida y representa a mucha gente famosa. Ella estaba trabajando para conseguirme agentes. Un día me dijo: ‘Voy a invitar a grandes agentes a tu próximo espectáculo. ¿Puedes hacerlo un poco menos gay este mes?’. Y me sorprendió. Era insultante, y también poco práctico, porque sería como cambiar literalmente toda mi personalidad. Les dije: ‘No sabéis realmente con lo que estáis tratando, porque tengo una vena un poco rebelde, y no voy a tratar con esa mierda’. Al final, me contrataron de todos modos”.

Dicha experiencia le quedó grabada en la memoria y le sirvió para hacerse una idea sobre Hollywood desde el punto de vista de un hombre gay. Algo que, sin duda, ha servido para inspirarle a crear Bros, la primera comedia romántica gay lanzada por un gran estudio.

A pesar de que Universal Studios está haciendo todo lo posible para promocionar la película entre un público amplio, Eichner subrayó que su primer largometraje como guionista no intenta representar una versión de la vida gay que sea «aceptable» para los espectadores heterosexuales. En otras palabras, no le interesaba hacer que Bros fuera «un poco menos gay”.

«Hemos pasado mucho tiempo como personas queer contando historias sobre nosotros mismos mientras nos preocupamos por ser agradables para el público heterosexual», dijo en una entrevista.

«Para mí, y para muchos de mis amigos, cuando vemos algunos de esos programas, aunque haya personajes gays, no reconocemos a esas personas. Son personajes bidimensionales de comedia de situación, que llevan trajes muy bonitos, y todo se hace con este velo satírico. Hay una arcada en muchos de los personajes masculinos gays que tenemos. Y uno de mis objetivos con Bros era, quería ser tan divertido como lo he sido antes, o más divertido, pero divertido de una manera diferente. Quería perder esa arcada. Quería que los personajes se sintieran como personas completas, complicadas, divertidas, tristes y tridimensionales».