
Joven transexual se suicida a los 18 años – Lo llaman suicidio. Se llama transfobia
Alan (17 años, Rubí). Ekai (17 años, Ondarroa). Thalía (17 años, Móstoles). Edu (18 años, Llíria).
Estos nombres son sólo los más sonados, los que encabezan una lista de niños víctimas de la transfobia. Los que decidieron que preferían quedarse a un lado del camino a seguir sufriendo agresiones y abusos.
El caso de Edu, la joven transexual de Llíria, es sólo el más reciente. Suicidio, lo llaman, cuando deberían llamarlo delito de odio. Porque ha sido el odio lo que ha acabado con ella. Dicen los que la conocían que le gustaba bailar y cantar. Que solía subir vídeos y fotos a sus redes sociales imitando a sus artistas favoritos. Edu tenía sueños, ambiciones. Pero también sufría.

En 2018 se publicó un estudio sobre el suicidio y los jóvenes en Pediatrics, la revista editada por la Academia Americana de Pediatría. Este estudio puso de relieve algunos datos sobre la tasa de intentos de suicidio. Entre los adolescentes trans esta era muy superior a la de los jóvenes cis.
El grupo que contaba con mayor número de intentos de suicidio era el de los chicos trans, que alcanzaba el 50,8%. No andaba lejos el porcentaje de los adolescentes no binarios, 41,8%. Finalmente, las chicas trans estaban algo por debajo, con un 29,9%.
No es el primer estudio que destacaba la vulnerabilidad de los adolescentes trans. Se ha comprobado que los niños y adolescentes transexuales padecen más depresiones que los niños y adolescentes cis de su misma edad. Otro estudio apuntaba a que las ideas suicidas entre los jóvenes transgénero duplica el porcentaje de la población general.

Hay también estudios que van en la línea opuesta. Los cuadros depresivos en este sector vulnerable pueden disminuir drásticamente. Por ejemplo, con el sencillo hecho de que en su entorno se utilice el nombre adecuado a su identidad de género.
Plataformas enfocadas a la defensa del colectivo trans están alzando la voz ante estos asesinatos sociales. Porque la transfobia mata, como bien dijo en su cuenta de Twitter Fran Ferrari, el síndic de Compromís en Les Corts. Y no sólo afecta a los adultos. La transfobia mata a jóvenes truncando sus vidas antes siquiera de que puedan empezar a vivirlas.
Ya va siendo hora de que existan leyes estatales que protejan los derechos y las vidas de los menores trans. No debería tratarse como una estrategia política o ideológica. No hablamos de medallas para los partidos políticos. Hablamos de la vida de nuestros niños.