La historia detrás del trasero peludo y la escena de desnudo de Taylor Zakhar Perez en ‘Red, White & Royal Blue’

Adéntrate en la historia detrás de la escena de trasero peludo y desnudo de Taylor Zakhar Perez en ‘Red, White & Royal Blue’

A pesar de toda la algarabía en torno a la posición del misionero en ‘Red, White & Royal Blue’ —sí, heterosexuales, ¡nosotros los gays también lo hacemos!—, la encantadora comedia romántica queer es en realidad bastante moderada cuando se trata de sexo y desnudez.

Oh, claro, se mencionan erecciones y alusiones a felaciones (¿recuerdas la primera escena de encuentro entre Alex y Henry cuando la película corta discretamente a una toma del altamente fálico Monumento a Washington?), pero fuera de ese momento de penetración cara a cara mencionado anteriormente, la película es bastante casta considerando su calificación R.

Sin embargo, obtenemos un par de vistazos fugaces de un trasero desnudo, con Alex de Taylor Zakhar Perez mostrando su generoso trasero cuando Zahra (Sarah Shahi), Jefa de Gabinete de la Casa Blanca, se encuentra cómicamente con el Primer Hijo y el Príncipe Henry (Nicholas Galitzine) después de otra noche juntos.

Una vez que superas esa curvatura perfecta de esas nalgas, podrías notar algo que no vemos con frecuencia en las películas, homosexuales o no: ¡pelo en el trasero! Sí, Zakhar Perez se dejó al natural y mostró su trasero peludo, una decisión pequeña pero notable que los espectadores queer están elogiando, y los amantes de los «otters» están particularmente satisfechos.

Pero casi no sucede así: Zakhar Perez aparentemente consideró afeitarse antes de su gran revelación trasera en la película. Fue Matthew López, el escritor y director de ‘Red, White & Royal Blue’, quien intervino para animarlo a mantener el vello.

Repetid conmigo: ¡Gracias, Matthew López!

Este jugoso detalle detrás de escena proviene del programa The Jess Cagle Show de SiriusXM, donde López charla con Patrick Gomez de EW sobre cómo llevar los sensuales cuerpos de sus estrellas a la pantalla y su aceptación de «la realidad del vello corporal».

Al igual que las conversaciones muy deliberadas que se tuvieron sobre el «momento de la penetración» de Alex y Henry, el cineasta revela que tuvieron una charla sobre si ir completamente lampiños o no.

«Entro en el remolque de Taylor», comparte López, «llevamos haciendo esta película por unas cinco o seis semanas en este punto—y [la diseñadora de cabello y maquillaje Karen Hartley] mira a Taylor y le dice, ‘Está bien, dile lo que me dijiste’. Y él dice, ‘No sé si debería afeitarme o no’. Yo digo, ‘¿Tu cara?’ y él dice, ‘No, cariño'».

Hm… ¿de qué podría estar hablando entonces?

Yo digo, ‘Bueno, ¿qué quieres hacer al respecto?'», continúa el director. Él dice, ‘Solo mira, ¿vale?’ Así que tenía a mi persona de cabello y maquillaje allí como chaperona—porque no quería que mi carrera terminara antes de comenzar, y Taylor, como, baja sus pantalones y dice, ‘Mira mi trasero’, y yo digo, ‘Estás bien, ¡te ves genial!'»

Ojalá ser una mosca en la pared de ese remolque.

Es una anécdota divertida—claramente López disfrutó compartiéndola—, pero en serio, es agradable ver una película LGBTQ+ grande y reluciente que no finja que todos los hombres queer nacen con traseros naturalmente lisos, ¿sabes?

Y todo fue intencional, hablando de la importancia de tener cineastas queer como López para representar historias y vidas queer. No debería sorprender ver pelo en un trasero en una película, ¡pero lo es!

«Mira, entiendo que es Hollywood», continúa López. «Lo que personalmente no entiendo es por qué no podemos cambiar esa definición de lo que es hermoso. Y casi nadie va a argumentar que estos dos jóvenes no sean hermosos, pero un cuerpo, en sí mismo, como es naturalmente, es algo magnífico.»

«Así que, sí, le dije a Taylor: ‘Por favor, ¡lleva tu trasero peludo al set!'»

¡Amén a eso! Cuando hablamos sobre la necesidad de una mayor diversidad de representación en la pantalla, por supuesto que incluimos la representación de traseros en todos los puntos a lo largo del espectro de lisos a peludos.

Y Taylor, por supuesto: ¡lleva tu trasero peludo a donde quieras!