
El trágico final de Fernando lumbreras, figura clave del movimiento LGTBI
Según informan agentes de la Policía Nacional, Fernando Lumbreras habría muerto de forma violenta en su propia vivienda en Valencia.
Fernando Lumbreras fue uno de los primeros presidentes de Lambda, y ha sido un reconocido activista por los derechos del colectivo LGTB.
La policía está investigando los hechos relacionados con el asesinato de Fernando Lumbreras
Fernando vivía solo en la calle Julián Peña, y fueron los propios vecinos los que alertaron a la policía, aunque cuando los agentes se personaron en el domicilio, solo pudieron constatar que había fallecido y que había sido una muerte por causas violentas.
Al parecer, además de los signos externos de violencia en el cadáver, la casa también se encontró revuelta. Se desconocen más datos por el momento sobre el posible móvil del crimen o si existen sospechosos del asesinato.
Una muy triste noticia para todos aquellos que le conocían y quienes formaban parte del colectivo LGTBI, por el que tanto luchó Lumbreras.

Una vida marcada por la lucha
Fernando fue un luchador toda su vida, así hablan de él quienes le conocían. Pero no solo luchó por los derechos de los homosexuales, su lucha comenzó mucho antes, primero contra la polio, una enfermedad que le dejó una cojera permanente.
Se crió en una familia tradicional, su padre fue legionario. Sin embargo, Fernando siempre estuvo orgulloso de su identidad y comenzó a reivindicar la libertad sexual incluso durante la dictadura franquista.
Así fue como en 1986 llegó a ser fundador y el primer presidente de Lambda. En esa misma década sufrió un aparatoso accidente en el que estuvo involucrado un camión que llegó a pasarle por encima y como consecuencia de ello, tuvo que ser intervenido y se saldó con una prótesis de cadera.
De Fernando sobre todo se destaca su hospitalidad y cercanía. Solía acoger a cualquiera que lo necesitase, ya que creía sin reparos en la “bondad y la grandeza del ser humano”.
Su lucha por conseguir una sociedad respetuosa con la diversidad de sus integrantes no llegó a concluir con éxito. Aún queda mucho por hacer hasta conseguir la igualdad de derechos para todas las personas sean cuales sean sus preferencias sexuales, sin embargo, gracias a personas como Fernando, que se atrevieron a exigir libertad cuando nadie más lo hacía, es mucho más fácil hoy recorrer ese camino.
